SANTUARIO A CRISTO REY
EL CERRO DEL CUBILETE
Uno de los santuarios mas visitados en el país se encuentra ubicado en el cerro llamado del cubilete -por la forma de un cono invertido en su término- en Silao, Guanajuato. A 2,579 metros sobre el nivel del mar se levanta un estatua imponente de Cristo que, con los brazos abiertos, ofrece su magnificencia a todo visitante que se acerque o lo vea desde kilómetros atrás.
El Santuario tiene capacidad para alojar a un nutrido número de peregrinos que asisten todo el año. Pero en particular el día 21 de noviembre se ve abarrotado de miles y miles de personas para la fiesta de Cristo Rey, durante el marco de las tradicionales fiestas patronales que año con año se realizan en este lugar.
Se llega hasta la cima rodeando el cerro por una pendiente empedrada y con curvas muy cerradas que por un momento parece que no tiene fin. Mientras más se asciende, la vista se vuelve cada vez mas impresionante pudiéndose observar la sierra de Guanajuato, el valle y los poblados de alrededor; se llega a una explanada que funciona como mirador y estacionamiento.
Esta Montaña está reconocida de manera ofical por la Comisión Geodésica de Guanajuato y por la Comisión de Geografía y Estadística Mexicana, como el Centro Geográfico de México. Es decir, el Monumento que descansa sobre su Santuario está, geográficamente hablando, en el Corazón de la República Mexicana.
Antes de ser colocada la estatua actual, en el cerro existía una de menores dimensiones. El Sr. Obispo de León, Dr. D. Emeterio Valverde Téllez, en Noviembre del año 1919, acudió de visita pastoral a la Parroquia de Santiago Apóstol, en Silao, Guanajuato, y se hospedó, en la casa del Templo de Señor del Perdón, atendido entonces por religiosos carmelitas.
Una tarde contemplaba silencioso el cerro del Cubilete y sintió en su corazón un deseo de "un día ascender a esa montaña y oficiar en su cima una Misa".
Se pensó después en dejar en la cúspide un recuerdo de tal celebración y el P. Eleuterio de Ma. Santísima Ferrer, propuso luego que se labrase una lápida conmemorativa, pero el Presidente de la Adoración Nocturna, D. Felipe Bravo fue el que planteó la erección de un monumento decorativo, porque la lápida podría ser borrada con el tiempo o ser arrancada, el P. Eleuterio propuso que se colocara sobre dicho monumento una imagen del Corazón de Jesús, puesto que la ciudad de Silao llevaba el nombre de Silao del Sagrado Corazón de Jesús y que puesta la imagen se entronizaría allá arriba.
Fue tal el entusiasmo que despertó la idea del Monumento, que en sólo cuatro semanas -del 13 de Marzo al 9 de Abril de 1920-, quedó terminada la obra del Primer Monumento al Sagrado Corazón de Jesús. El padre Eleuterio pidió limosna para construir el monumento y él mismo dirigió los trabajos del labrado de la estatua y de la columna.
El 11 de Abril de 1920; el Prelado Valverde, al amanecer bendijo primeramente la Montaña para que desde ese momento fuese considerada como un lugar santo y en alta voz declaro que aquel cerro llamado hasta entonces "El Cubilete" ahora se denominaría La montaña de Cristo Rey y aquella multitud aclamó: ¡Viva la montaña de Cristo Rey!. El Papa Benedicto XV bendijo el primer monumento.
Esta estatua fue dinamitada por la persecución religiosa desatada en México el día 30 de enero de 1928. Después del estallido, regresaron a Silao varias personas sobre un camión llevando consigo la cabeza y corazón del monumento que habían quedado intactos. En 1934 algunos adoradores intentaron restaurar el monumento, pero no fue posible.
En el año de 1944 Nicolás Mariscal edifico la gigantesca estatua que hoy se alza imponente. La escultura mide 20 metros de altura y pesa 80 toneladas. En el interior, sobre una plataforma circular de tres gradas, esta la mesa del altar y sobre esta, en señal de realeza, cuelga una gran corona metálica que enfatiza la bóveda circular hecha con anillos y nervaduras. En cada uno de los costados de la estatua se encuentra un ángel que reposan sobre un hemisferio de concreto que simboliza al universo, con sus meridianos y paralelos terrestres, esta semiesfera descansa sobre ocho columnas de concreto que representan a las ocho provincias eclesiásticas de México. A los pies de Cristo, arrodillados están los ángeles que le ofrecen dos coronas: la del martirio y de la gloria, con que Cristo siempre será venerado.
Por su ubicación a 2,579 metros de altura podemos considerar, que éste es, el centro religioso dedicado a la cristiandad que está más cerca del cielo.
EL CERRO DEL CUBILETE
Uno de los santuarios mas visitados en el país se encuentra ubicado en el cerro llamado del cubilete -por la forma de un cono invertido en su término- en Silao, Guanajuato. A 2,579 metros sobre el nivel del mar se levanta un estatua imponente de Cristo que, con los brazos abiertos, ofrece su magnificencia a todo visitante que se acerque o lo vea desde kilómetros atrás.
El Santuario tiene capacidad para alojar a un nutrido número de peregrinos que asisten todo el año. Pero en particular el día 21 de noviembre se ve abarrotado de miles y miles de personas para la fiesta de Cristo Rey, durante el marco de las tradicionales fiestas patronales que año con año se realizan en este lugar.
Se llega hasta la cima rodeando el cerro por una pendiente empedrada y con curvas muy cerradas que por un momento parece que no tiene fin. Mientras más se asciende, la vista se vuelve cada vez mas impresionante pudiéndose observar la sierra de Guanajuato, el valle y los poblados de alrededor; se llega a una explanada que funciona como mirador y estacionamiento.
Esta Montaña está reconocida de manera ofical por la Comisión Geodésica de Guanajuato y por la Comisión de Geografía y Estadística Mexicana, como el Centro Geográfico de México. Es decir, el Monumento que descansa sobre su Santuario está, geográficamente hablando, en el Corazón de la República Mexicana.
Antes de ser colocada la estatua actual, en el cerro existía una de menores dimensiones. El Sr. Obispo de León, Dr. D. Emeterio Valverde Téllez, en Noviembre del año 1919, acudió de visita pastoral a la Parroquia de Santiago Apóstol, en Silao, Guanajuato, y se hospedó, en la casa del Templo de Señor del Perdón, atendido entonces por religiosos carmelitas.
Una tarde contemplaba silencioso el cerro del Cubilete y sintió en su corazón un deseo de "un día ascender a esa montaña y oficiar en su cima una Misa".
Se pensó después en dejar en la cúspide un recuerdo de tal celebración y el P. Eleuterio de Ma. Santísima Ferrer, propuso luego que se labrase una lápida conmemorativa, pero el Presidente de la Adoración Nocturna, D. Felipe Bravo fue el que planteó la erección de un monumento decorativo, porque la lápida podría ser borrada con el tiempo o ser arrancada, el P. Eleuterio propuso que se colocara sobre dicho monumento una imagen del Corazón de Jesús, puesto que la ciudad de Silao llevaba el nombre de Silao del Sagrado Corazón de Jesús y que puesta la imagen se entronizaría allá arriba.
Fue tal el entusiasmo que despertó la idea del Monumento, que en sólo cuatro semanas -del 13 de Marzo al 9 de Abril de 1920-, quedó terminada la obra del Primer Monumento al Sagrado Corazón de Jesús. El padre Eleuterio pidió limosna para construir el monumento y él mismo dirigió los trabajos del labrado de la estatua y de la columna.
El 11 de Abril de 1920; el Prelado Valverde, al amanecer bendijo primeramente la Montaña para que desde ese momento fuese considerada como un lugar santo y en alta voz declaro que aquel cerro llamado hasta entonces "El Cubilete" ahora se denominaría La montaña de Cristo Rey y aquella multitud aclamó: ¡Viva la montaña de Cristo Rey!. El Papa Benedicto XV bendijo el primer monumento.
Esta estatua fue dinamitada por la persecución religiosa desatada en México el día 30 de enero de 1928. Después del estallido, regresaron a Silao varias personas sobre un camión llevando consigo la cabeza y corazón del monumento que habían quedado intactos. En 1934 algunos adoradores intentaron restaurar el monumento, pero no fue posible.
En el año de 1944 Nicolás Mariscal edifico la gigantesca estatua que hoy se alza imponente. La escultura mide 20 metros de altura y pesa 80 toneladas. En el interior, sobre una plataforma circular de tres gradas, esta la mesa del altar y sobre esta, en señal de realeza, cuelga una gran corona metálica que enfatiza la bóveda circular hecha con anillos y nervaduras. En cada uno de los costados de la estatua se encuentra un ángel que reposan sobre un hemisferio de concreto que simboliza al universo, con sus meridianos y paralelos terrestres, esta semiesfera descansa sobre ocho columnas de concreto que representan a las ocho provincias eclesiásticas de México. A los pies de Cristo, arrodillados están los ángeles que le ofrecen dos coronas: la del martirio y de la gloria, con que Cristo siempre será venerado.
Por su ubicación a 2,579 metros de altura podemos considerar, que éste es, el centro religioso dedicado a la cristiandad que está más cerca del cielo.